Debemos tener en cuenta cuatro puntos importantes que pueden fortalecer nuestra marca, pueden aplicarse en cualquier categoría. Hay varios puntos que nos servirán de guía para construir una buen diseño de marca.
1. Identidad de marca. Debemos definir la marca de manera sólida, coherente y consistente, a fin de asegurarse que los clientes la identifiquen y la asocien a una categoría, producto o servicio a primera vista. Se trata de la primera impresión de la marca. Además de contar con las emociones del cliente también podemos trabajar en su memoria, la parte cognitiva del cliente.
2. El significado de la marca. Aquí se incorporan las asociaciones tangibles e intangibles de la marca. La construcción mental que hace el cliente, donde participan las emociones, las experiencias y la personalidad de ambos.
3. Experiencia del cliente. Requiere que la marca se involucre con la experiencia del cliente y genere respuestas adecuadas frente a la identificación y significado de la marca.
4. Por último, el cuarto punto clave unifica los anteriores al buscar convertir las respuestas de la marca en relaciones duraderas y sólidas con los clientes. Esto llevará a generar un mayor nivel de lealtad hacia la marca.
